Política afectiva. Apuntes para pensar la vida comunitaria

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(2010)

La pregunta es entonces cómo generar territorios políticos en tanto ambientes para la creación de planos relacionales que promuevan un pensamiento político determinado por la amistad y el amor, la alegría y la generosidad. Y no será una pregunta que alimente expectativas utópicas, ya que el texto de Annabel se refleja en la vida de colectivos autónomos que en sus diferencias apuestan a este otro modo de lo político.Colectivos que están lejos de consumar un ideal, pero simplemente porque este ideal no puede existir, ya que tener un modelo a seguir significaría para estos colectivos autónomos perder justamente lo que tienen de autonomía. Muchas veces, las construcciones políticas autónomas y autogestivas “quedan atrapadas en una falsa disyuntiva y culminan ahogándose ante la cooptación o la confrontación”. Y es que no es fácil enfrentar el problema de la relación con el Estado, que en sus múltiples niveles siempre operará en contra de iniciativas que promuevan modos de vida que expresen diferencia. Pero estos modos de vida están ahí, y Política Afectiva nos llama a ver que “no somos los únicos, que hay otros que experimentan sensaciones parecidas”. “Sin duda, son tiempos de intensas mutaciones, es preciso tener presente que pensar es crear, inventar y no seguir apegados a las formas vigentes que están mostrando seriamente su ineficacia.  Abordar los problemas con lucidez, encontrar los mejores modos de plantearlos, confeccionar  herramientas apropiadas para resolverlos significa realizar un acto creativo, abierto a las potencias del devenir portadoras de lo nuevo, del estímulo necesario para confiar en nuestros deseos singulares-colectivos. Por ello, a pesar de las creencias que a diario muestran las dificultades, las soledades, comenzamos a vislumbrar que hay hombres y mujeres que trabajan con alegría en la realización de sus deseos creativos, que apuestan a la constitución de modos de vida solidarios y amorosos. Pensarnos  como hacedores, como seres en relación, que al realizar su actividad mantienen encendida su propia luz,  permite visualizarnos como un enjambre luminoso productor de una trama capaz de expandirse y dar lugar a nuevos modos de vida.”

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